HABLAMOS CON ESTEVE GARRIGA, PROFESOR DE L’IDEM, DEL CORTO “ROMPESUELOS”

Una gran cantidad del material gráfico de hoy es en  3D. La mayor parte del tiempo el 3D está ahí, sin darnos cuenta. Animaciones, imágenes, logos, películas… ¿sabías que el catálogo de Ikea está hecho en 3D? La animación y la creación digital parece un producto sencillo por la velocidad a la que lo consumimos. Pero el proceso de creación de una sola animación puede tardar hasta 6 horas. ¿Valoramos cuánto cuesta elaborar una animación 3D? Y más importante aún ¿Valoramos suficiente el esfuerzo de los profesionales que se dedican a ello?

Hablamos con Esteve Garriga, profesor de técnica generalista y 3D en l’Idem Creative Art School a raíz del corto Rompesuelos, que hizo junto a sus alumnos.  Queremos que nos hable de cómo es haber sido alumno y a la vez maestro de unos estudios que, en términos temporales, casi acaban de nacer y que están en constante crecimiento. Nos enseña, el arduo proceso de la creación 3D, de cómo ve a los alumnos que desfilan por sus clases día a día y sobretodo de su pasión por la animación. Esteve empezó a vincularse al mundo de la animación y el 3D en el año 2000,  así que ya van casi dos décadas en la cresta de la ola, surfeando los cambios y las evoluciones del mundo digital. Y, mientras el continua aprendiendo, traspasa sus técnicas al futuro de la profesión.

En l’Idem el proceso de formación de los alumnos pasa de lo general a lo especifico. Muchos de los chicos que llegan con aspiraciones de estudiar animación no tienen una idea formada de lo que implica trabajar en la creación digital, así que la formación que imparten está concebida como una progresión. El primer año se imparten una serie de materias troncales: historia de la animación, dibujo artístico, composición, animación 3D, animación 2D, diseño de personajes… y también lenguas, porque el mundo profesional de la animación y el 3D es completamente internacional. A partir de aquí los alumnos escogen qué especialidad encaja más con ellos y se especializan en ese ámbito. Un proceso pedagógico que cuida las aspiraciones del alumnado para que el camino que escojan sea el más acertado.

¿Cuánto tiempo puede tardar en elaborarse un videojuego? Es la ingenua pregunta que inicia una larga conversación sobre las técnicas de creación de personajes y los retos de futuro del 3D. Esteve ríe, “Hasta la cosa más sencilla, unos cuatro años” nos dice. Desde que se concibe el embrión de esa idea hasta que llega al mercado tal y como nosotros lo consumimos pasan unos cuatro años. Pero si cada día hay juegos nuevos, apps nuevas… cuatro años parece demasiado para algo que tardamos segundos en liquidar. El proceso de creación de un videojuego no difiere tanto de cómo es la idea inicial de una película. Todo empieza con una pequeña idea resumida en tres líneas y a partir de ahí se va tejiendo tanto el storytelling narrativo, los concept art de personajes, paisajes, las animaciones…

Para hablarnos del complicado proceso de la creación de un personaje, Esteve nos muestra esta demo dónde se aprecia como a través de cubos se construye un busto digital. Nada de dibujos en tablets, nada de mano alzada. Cubos. Todavía nos estamos recuperando de la impresión después de ver este video…

Le preguntamos por el corto Rompesuelos, proyecto elaborado por alumnos de l’Idem en el que Esteve ejerció de director i supervisor. La idea surgió de los alumnos, quienes cuentan con una libertad total para elaborar sus ideas. El embrión de “Rompesuelos” empezó siendo un anunció de bebida energética. La idea era canalizar que esa bebida te daba la fuerza de un robot. La idea fue mutando a cada reunión y al final terminó siendo una batalla danzante de dos robots con mucho arte. Los procesos de creación de cortos, ficciones y videojuegos siempre empiezan en un punto “A” y terminan en un punto “Z”, pero una vez la idea ya tiene una forma definida hay que intentar no cambiar, porque sino el proceso sería eterno. Esteve nos habla de la importancia de los tempos a la hora de elaborar un proyecto de animación. Los deadlines hay que seguirlos con rigurosa exigencia porque sino, siempre hay algo que mejorar, o una técnica nueva que aplicar.

Antes de empezar un corto, hay un proceso de pre-producción donde se definen la historia, el guión literario, el storyboard y el guión técnico. Se hacen los concept art de los personajes a través de referencias reales. Así será más fácil dotar de personalidad a los personajes. Luego vendría todo el estudio de inspiración con fotos reales.  Ya pasamos a los Turn Around para que los generalistas 3D puedan modelar los personajes.

Esta ya es la fase de producción donde los generalistas 3D empiezan modelando los personajes, hacen los UV (se trata del mapeado en plano de una figura con volumen a las que se le añaden las texturas), añadir el rigging (es el esqueleto y los controladores para que los animadores puedan mover los personajes), al mismo tiempo se van creando los materiales y las texturas y se prepara los personajes para el render (imagen final).  Mientras los generalistas 3D hacen las texturas, materiales, iluminación y render. Los animadores preparan las escenas, primero unlayaout (vendría a ser como mover muñecos completamente rígidos, para tener una idea de donde está la cámara y el tiempo de cada plano), después se va haciendo la animación en blocking (solo se marcan las posturas clave, es una animación con un aspecto muy robótico). Para finalizar la animación se pasan a splines las curvas de animación (todos los movimientos son representados en una gráfica: movimiento, rotación o escalado en función al tiempo. En el proceso de blocking estas gráficas son completamente horizontales y verticales pero en al finalizar la animación se pasan a curvas spline para que se pueda controlar la aceleración y frenada de la animación). Una vez se tienen todas las imágenes definitivas se haría la composición final post-producción.

Esteve nos enseña las creaciones de sus alumnos. Asombra el uso de la luz, los reflejos en los objetos y, después de haber visto el difícil proceso de creación una sola animación, que no haya una alta tasa de abandono en los estudios. Todo lo contrario, hablando con él se percibe que el mundo de la animación tiene magia. Aunque implique dedicación y horas delante de una pantalla, tiene algo que a los que no sabemos cómo es posible que haya cosas que se mueven en nuestros ordenadores, que los dinosaurios de Jurassic World parezcan reales, o que el catalogo de Ikea es pura fantasía,  somos incapaces de percibir. Así que solo nos quedará admirar su trabajo, y empezar a valorarlo un poco más.

Os dejamos aquí el corto Rompesuelos elaborado por los alumnos de l’Idem.

L’IDEM BARCELONA
CARRER CIUTAT DE GRANADA, 53-57